¿INTEGRAR O NO INTEGRAR
LA COCINA?

Debido a lo complicado que es la desición de integrar o no la cocina, hay que tener en cuenta 3 criterios que no pueden aplicarse por separado.

Los criterios deben aplicarse al mismo tiempo. Por ello, la visión profesional y sus posibilidades de articulación holística es lo más recomendable.

Pertinencia vivencial de la operación:

Significa considerar si la integración de la cocina a otras zonas de uso de la vivienda es efectivamente un salto cualitativo en la experiencia, las costumbres y los hábitos o va a ser nociva para la convivencia y el desarrollo de actividades.

cocina en Alta Córdoba, Córdoba.

Ejemplo: El error de derribar paredes por la promesa de más amplitud solo para después confirmar que la puerta entre cocina y comedor servía para hacer home office y videollamadas que no se ponderaron al momento de pensar si la operación era “pertinente” desde lo vivencial

Pertinencia constructiva de la operación:

Esto significa analizar si la construcción soporta el retiro de muros y límites entre ambientes sin presentar riesgos de estabilidad o sobrecarga de los elementos portantes restantes. Y también significa evaluar si las cañerías que cambian de posición tendrán una performance igualmente eficiente a las de la situación original (pendientes, empalmes y la posible disminución de presión por cambios de recorrido de cañerías: codos o más metros de extensión).

Cocina remodelada como nueva. Caballito, Buenos Aires.

Cocina a remodelar. Caballito, Buenos Aires.

Pertinencia económica de la operación:

No es tanto si podemos pagar o no la obra. Es más bien el análisis de la relación “costo- beneficio” del dinero que pensamos invertir y la satisfacción espacial que vamos a obtener.

Ejemplo: Crecer con la cocina integrándole el balcón puede implicar un gasto importante en: techo, cerramientos, contrapisos, paredes, plomería, mesadas y prácticamente todos los rubros de la construcción, para integrar ese ancho de un metro de balcón. Probablemente la inversión sea grande y al mismo tiempo, es muy probable que no haya una sensación de amplitud muy diferente a la que existía antes de remodelar.

Cocina integrada con gran isla. Rosario, Santa Fé.

Solo al superar la evaluación en base a estos tres criterios podremos pasar a hilar más fino desde lo proyectual considerando estos tips:

EVALUAR UBICACIÓN DE VENTILACIÓN Y LUZ NATURAL, MESADAS Y DESAYUNADORES

Siempre será lo mejor que como resultado de la integración la luz natural y la ventilación sean poderosas sobre la mesada (donde trabajaremos). Generalmente se piensa al revés, pensando en beneficiar más la mesa y las sillas. Nosotros creemos que si hay una sola cara al exterior y junto a ella está la mesada, el sol igualmente llegará a la mesa (pues al terminar de cocinar, quien estaba frente a la mesada se sienta a la misma mesa y desbloquea la luz).

Cocina remodelada con ventanal sobre bacha. CABA.

En cambio, si lo que ponemos junto a la ventana es la mesa, lo más probable es que la mesada quede en penumbras contra alguna de las otras paredes del recinto. Básicamente porque quién cocina proyectará su propia sombra sobre la mesada al cocinar.

EVALUAR ZONAS DE ESTAR, DE PASAR Y DISTANCIAS PARA COCINA, COMEDOR Y LIVING

Es muy útil pensar las zonas de uso específico que imaginamos y que justifican el esfuerzo de ampliar la cocina con la integración: Si hay barra desayunadora, las banquetas no pueden quedar obstruyendo el paso o el lugar donde pararse a cocinar. Al mismo tiempo, las banquetas y el mueble bajo mesada deben permitir alojar las rodillas debajo de la mesada (NO como en la foto).

Cocina con isla erróneamente colocada.

Algo similar sucede con las sillas que no pueden quedar arrinconadas contra una pared obstruyendo el paso u obligando a pararse a quien esté sentado para que alguien pueda pasar a sentarse en otra silla.
Si hacemos 2 mesadas paralelas la medida ideal arranca en 1,20m entre ellas (para que trabaje una persona en cada mesada). Es un error muy común separarlas solo 90cm. Pero esa medida aplica cuando entre la mesada y una pared, no entre mesadas.

EVALUAR POBLACIÓN EN MESA, EN LIVING, FRENTE A TV PRETENDIDOS

Antes de iniciar el proyecto, debernos comunicarle al profesional cuantos comensales necesitamos sentar en la mesa. Cada familia es un mundo y hay que evaluar qué pasa los fines de semana con hijos que llegan. O novios que se suman, o padres que nos visitan. Esto es determinante y puede generar la conclusión de que hay que suprimir una de las mesadas que habíamos imaginado o directamente “convertir” la mesa que soñamos en una mesada grande tipo isla para cocinar y al mismo tiempo comer en familia.

Cocina con isla frente a televisión. San Isidro, GBA.

La posición de la TV es importante. Porque mirar la tele también es un rito. Para algunos es una compañía mientras uno cocina en soledad. Y para otros, es un hábito familiar, como el fútbol con pizza, cerveza y amigos. El análisis del recinto para este rito nos orientará sobre la posición relativa (a la mesada o a la mesa) de la TV.

EVALUAR SECTORIZACIÓN POR PISOS , CIRCULACIONES Y VENTANAS

Si tenemos la posibilidad, es muy bueno que cada sector tenga alguna forma de iluminación natural propia. Nos referimos a la ventana “ de la mesada”, la ventana “del comedor”, o la puerta-ventana “del living”, si tenemos esta posibilidad, esto permitirá que algún comprador de nuestra casa pueda des- integrar los ambientes, armando tabiques entre los sectores sin que estos pierdan su autonomía de ventilación e iluminación.

Cocina con paso al exterior por medio de una puerta ventana. Córdoba capital.

Y es un gran argumento de venta hacia quienes no están “tan convencidos” de las cocinas integradas. Los pisos también son una posibilidad de dar identidades diferentes a los lugares. Que si bien pueden ser continuos, pueden también dar contención y tener “identidad propia” tan solo cambiando de piso de manera compuesta con los otros pisos del mismo gran ambiente integrado.

EVALUAR CONTINUIDAD VISUAL DE REVESTIMIENTOS Y EQUIPAMIENTO

Es muy sutil la decisión de usar un solo revestimiento en pisos para zonas de estar comedor y de cocina en el proyecto de integración. En efecto, como decíamos, es complejo elegir un corte entre piso de madera bajo un sillón y un porcelanato bajo la mesada.

Cocina integrada con suelo vinílico símil madera.

Requiere de una definición previa sobre si queremos marcar “zonas” con identidad propia o queremos generar un continuo indefinido en cocina, estar y comedor. La ventaja de lo segundo es que dará mayor sensación de amplitud, pero la desventaja es que ese efecto se logrará mejor si evitamos lo más posible las alacenas, a fin de que la “identidad” de la cocina no impregne toda la atmósfera del lugar y tome preponderancia sobre la identidad de las otras áreas.